Hoy, luego de una reunión de trabajo, caminando por el centro de Valparaíso, frente al Municipio, Carabineros había cerrado la calle, y yacía tapado por un plástico el cuerpo de una señora. El silencio era bullicioso, el tiempo se había congelado moviéndose todo el mundo a una velocidad que distaba mucho de la premura habitual de un día viernes a las 13 horas. Recordé la película Río Místico y esa dolorosa lentitud en que sucede lo terrible....

Aparecieron mis miedos, mis fantasmas, mis más profundas dudas.


Me doy cuenta que vivimos en una ilusión de la "historia personal", pensamos que lo que pasa en el mundo sólo tiene que ver con lo que nos pasa a cada uno, y es en la estrechez de la mirada que perdemos al otro, a ese otro que nos permite convertirnos en lo que somos, en seres humanos, incapaces de exixtir sino es en comunidad.

Me surge la dolorosa historia paralela que se teje en este momento para los cercanos de la señora, un dolor que no puedo dejar de compartir, de sentir, como si fuera mío. Mi más profunda compasión aparece en algo que no me pasó a mi, pero que al fin y al cabo si me está pasando... el límite entre lo que me pasa y lo que le pasa a otro es tan difuso.


Hoy será un día de reflexión y reconexión con los que amo...
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Blogger Hernan Torres]]>
Pablo Reyes: LA PODEROSA MUERTE

viernes, septiembre 16, 2005

LA PODEROSA MUERTE

Hoy, luego de una reunión de trabajo, caminando por el centro de Valparaíso, frente al Municipio, Carabineros había cerrado la calle, y yacía tapado por un plástico el cuerpo de una señora. El silencio era bullicioso, el tiempo se había congelado moviéndose todo el mundo a una velocidad que distaba mucho de la premura habitual de un día viernes a las 13 horas. Recordé la película Río Místico y esa dolorosa lentitud en que sucede lo terrible....

Aparecieron mis miedos, mis fantasmas, mis más profundas dudas.


Me doy cuenta que vivimos en una ilusión de la "historia personal", pensamos que lo que pasa en el mundo sólo tiene que ver con lo que nos pasa a cada uno, y es en la estrechez de la mirada que perdemos al otro, a ese otro que nos permite convertirnos en lo que somos, en seres humanos, incapaces de exixtir sino es en comunidad.

Me surge la dolorosa historia paralela que se teje en este momento para los cercanos de la señora, un dolor que no puedo dejar de compartir, de sentir, como si fuera mío. Mi más profunda compasión aparece en algo que no me pasó a mi, pero que al fin y al cabo si me está pasando... el límite entre lo que me pasa y lo que le pasa a otro es tan difuso.


Hoy será un día de reflexión y reconexión con los que amo...

1 Comments:

Blogger Hernan Torres said...

a mi me pasó lo mismo cuando vi el cuerpo tapado de una señora... los que me pasò ese día fué bien parecido a lo que te pasò a ti.

9/28/2005 6:07 p. m.  

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